miércoles, 30 de octubre de 2013

lunes, 28 de octubre de 2013

Crónica salida 26/10/13

Quedada a las 10:00 en el sitio de oficial. Solo cinco componentes (Sallas, Campana , Goyo, Benja y Fernando), para lo que prometía ser un día de lluvia, que al final resultó ser bastante agradable. La salida comienza a las 10:10, dirección a Villamuelas, pasando por Villasequilla, y la Zona Cero, donde Enrique dió con su clavícula en el suelo y le ha apartado de los cerritos por un tiempo. Tras llegar a Villamuelas, tomamos dirección hacia la antigua estación de tren de Huerta, donde hacemos una pequeña parada para la foto conmemorativa y comer algo.
Ya desde aquí seguimos dirección a Huerta, donde al llegar, tenemos que tomar un pequeño tramo por carretera hasta adentrarnos en el pueblo y hacer el último esfuerzo subiendo la cuesta de las placas, para ya llaneando llegar a Yepes.
Al final 46,24 kilometros en algo menos de 3 horas (+/- 2:50)

Crónica Bola del Mundo (19/10/13)

Hola Bikers, Sólo nueve días después de nuestra ascensión a la Bola del Mundo os dejo esta pequeña crónica de cómo sucedió “casi todo” jejeje Todos sabéis que nuestras marchas fuera de Yepes comienzan un día antes, con la preparación de las máquinas y cargando los vehículos, y con la duda de si llovería o no. En este caso, Javi con su coche, y el carro y el coche de Mampi fueron nuestro transporte hasta Cercedilla, una vez allí…fueron nuestras propias piernas. La llegada fue monumental, aparcamos frente a Casa Cirilo (luego hablaremos de esto) y allí nos juntamos con el grupo de amigos que Fernando había convocado desde Fuenla. Todo un grupo de buenos bikers y mejores personas. Fue descargar las bicis y ponernos a rodar, haciéndonos antes, claro, la foto de rigor –podéis ver a Dani con la bici en alto-.
Comenzamos por la carretera que sube hacia la sierra, pero pronto cogimos una buena pista ascendente que nos llevaría hasta el Mirador de la Reina y a la puerta de la Fuenfría, donde comenzó la verdadera aventura por el camino Schmid, una senda de lujo que nos llevaría hasta el mismísimo puerto de Navacerrada.
Chocolatina y alimento, y para arriba. Comenzó la subida a la Bola del Mundo, un duro ascenso pero gratificante donde los haya, con todo el desarrollo y eso pesaba, pero de verdad, día nublado y algo de fresco por ahí arriba. Si la subida fue especial, no menos fue la bajada, la bici se dispara hacia abajo igual que un tiro, y sujetarla sólo deja un olor a soldadura que te recuerda cualquier taller de cerrajería. Al bajar, café para entrar en calor, fotito de rigor con todos en el bar…y regreso hacia Cercedilla. La vuelta fue por el mismo sitio que la ida, por el ya comentado Camino Schmid.
Al llegar al parking cargamos todo a los coches, nos quitamos el disfraz de biker y nos tomamos una merecida cervecita en Casa Cirilo, allí nos quedó un sabor agridulce: nos teníamos que despedir de nuestros amigos de Fuenlabrada, pero con la promesa de volvernos a ver en otra de estas. Nos subimos a comer y a degustar un buen chuletón (podéis ver las fotos), y después de comer y con toda la caraja….cogimos rumbo a casa.
Lo que apuntaba ser un día gris, se convirtió en un día color de rosa. La gasolina, el chuletón, la horquilla de alguna bici, algún freno quemado…unos cuantos euros. Subir a La Bola del Mundo, disfrutar de buena compañía y de lo que te gusta…no tiene precio. PD: Podéis ver las fotos de ese día en el enlace

martes, 22 de octubre de 2013